quinta-feira, 21 de julho de 2022


                  La buscadora y la sombra


No SE ENCUENTRA lo que se busca,
                                             si una no está preparada.
Yo fui buscando una luz, arañando el silencio de tus
ojos, rasgando el manto de los nada, con un dejo in-
consciente de amargura. Y encontré lunas llenas de
lágrimas, extendidas por la humedad de los páramos.
Encontré una llama sin (co)lapso y una flor equívoca
con un corazón tan negro como el resplandor del sol.
La luna masculina/ alemana me dijo: "hay que sombrear
la luz, darle la oscuridad de una orquídea y el latir
de un corazón verdadero". Toda fui huida, retorno,
negror, al fin Sombra: Sombra del hombre bajo mi
pesado párparo de luz y lloré, improvisando el
Olvido, de memoria, porque quien busca la luz
tiene que descubrir el verdadero sentido de la Sombra.


   Santiago Aguaded Landero. Volaverunt opus nigrum. Sevilla: Algaida Editores, 2018, p 65.
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